DEATH CAB FOR CUTIE. "Codes And Keys"

Hay discos que te marcan para siempre. En mi caso Transatlanticism (Barsuck Records, 2003) de Death Cab For Cutie fue uno de ellos. El cuarto álbum de los de Bellingham es un monumento a las emociones que producen los sonidos. Repleto de canciones entre lo sugestivo, el melodrama, y la intensidad, Transatlanticism supuso dejar el listón muy alto para los próximos trabajos de Ben Gibbard y los suyos. Y efectivamente, los siguiente álbumes Plans y Narrow Stairs, aun siendo obras nada desdeñables, recorrían otros caminos, quizás mas oscuros, y no alcanzaban el nivel creativo y emocional del disco de 2003. Bien, pues ahora Death Cab For Cutie se sacan de la manga un discazo, en mi opinión a la altura del Transatlanticism. Codes and Keys (Warner) contiene la esencia de aquellos DCFC que nos hicieron vibrar años atrás. Es un disco de absoluta madurez y frescura al unísono, lleno de sensibilidad y contención, donde se destilan más las esencias y las texturas de los teclados y bases retro que las guitarras. Se nota un exquisito trabajo de producción del guitarrista Chris Walla, que ha dotado a toda la obra de matices analógicos, instrumentando cuando era necesario You are a Tourist o Code And Keys; y buceando en la elegancia y la sobriedad como en St. Peter's Cathedral. En ocasiones se deja llevar por su lado más mainstream y nos deja canciones absolutamente rítmicas como Doors Unlocked And Open, donde una línea de bajo memorable, no puede dejarnos parados. En definitiva, Codes And Keys es un disco a la altura de lo más grande de DCFC; otro de esos discos para la posteridad. JMA